Los 60 años que componen el siglo chino llevan un sistema de numeración bastante complejo.
Existen diez números llamados “Troncales del Cielo” que son como los diez primeros números ordinales: primero, segundo, tercero…, décimo. A la vez, existen otro doce números denominados “Ramales de la Tierra” que equivalen a los doce números cardinales: 1, 2, 3, 4…, 12.
La pronunciación de estos números es difícil para un hispanohablante, y lo es más todavía su escritura. Pero es suficiente saber que la representación de los 60 años del siglo chino se basa en la combinación de los números ordinales y cardinales, o sea el “Cielo con la Tierra”. Eso supone que se repiten seis veces los números del “Cielo” y cinco veces los de la “Tierra”, en combinaciones distintas. Eso es debido a que el número de los 60 es múltiplo de los diez números “celestiales” y de los doce “terrenales”.
Las 60 combinaciones son fijas y se repiten cada siglo chino. No existe una numeración global tal como el calendario cristiano. Para los anales históricos, la, ubicación cronológica suele señal primero la Dinastía (Tang, Song, Qing por ejemplo), luego el Reinado (Wudi, Wendi, Kangxi, etc.), y después los años. Como solo en casos muy excepcionales (uno o dos casos) un Reinado excede los 60 años, no hay posibilidad de confusión.